El mataronés Lamine Yamal, estrella del FC Barcelona y segundo clasificado en la última edición del Balón de Oro, ha compartido recientemente en una extensa entrevista en el prestigioso programa estadounidense 60 Minutes, de la CBS, recuerdos de su infancia y su origen en el barrio de Rocafonda, uno de los más humildes y diversos de la capital del Maresme.
En la entrevista, Lamine recordó cómo creció en una comunidad de inmigrantes magrebíes y subsaharianos, marcada por la incertidumbre y las dificultades económicas. “Era un barrio donde nadie sabía qué le esperaba en la vida. No sabías si acabarías siendo futbolista, arquitecto, pintor o si encontrarías trabajo. Veías a tus padres trabajando, no podían estar siempre contigo, y sentías una incertidumbre constante”, explicaba.
Soccer star Lamine Yamal grew up in Rocafonda, a struggling North African immigrant enclave in Spain. He honed his skills on a concrete slab that doubled as a make-do soccer pitch. https://t.co/XkIcScGDNH pic.twitter.com/sZnh1LihkH
— 60 Minutes (@60Minutes) December 1, 2025
Lamine empezó a jugar al fútbol muy pequeño, perfeccionando su técnica en una pista de cemento de Rocafonda. “Donde jugaba, en mi barrio… había como unos muros donde la gente se sentaba, y creo que no había mejor sensación que conseguir que las personas que estaban sentadas se levantaran riéndose de los oponentes. Es la mejor sensación del mundo y me recuerda mucho a cuando juego en el campo y los aficionados se levantan sorprendidos por una jugada que he hecho”, explicaba. Esta vivencia, según el jugador, ha marcado su manera de disfrutar del fútbol y de compartirlo con los aficionados.

El mural dedicado a Lamine Yamal, en el Parque de Rocafonda
Además, Lamine reivindicó el orgullo por su barrio: “No somos Sarrià, no somos Paseo de Gracia. Pero barrios como los nuestros son los más recordados. Somos los que más luchamos para tener una buena vida. Puede que seamos olvidados por otras personas, no por los que somos de allí. Estamos orgullosos de ser de Rocafonda. No puedo sentir presión por jugar a fútbol. Pienso que toda mi familia y mis amigos lo han pasado peor que yo”.
Su tío Abdul, que regenta el LY 304 Café a pocos metros de la pista donde Lamine jugaba, recuerda en el mismo programa la madurez del sobrino desde pequeño: “Era muy espabilado, lo hacía todo solo. Tiene la madurez de un adulto de 25 o 30 años”, decía en la entrevista. Hoy, cada vez que marca un gol, Lamine celebra con un gesto que recuerda el código postal del barrio: el 304.
Lamine Yamal sobre el barrio de Rocafonda que la ultraderecha de VOX llama "estercolero multicultural": "No somos Sarrià ni Paseo de Gracia. Somos los que más luchamos por tener una buena vida. No puedo sentir presión, presión tenían mis padres para sacar a una familia adelante". pic.twitter.com/Mx9J1EbRHD
— Fonsi Loaiza (@FonsiLoaiza) December 2, 2025
El FC Barcelona descubrió a Lamine cuando tenía solo seis años, y pronto empezaría a viajar diariamente en tren desde Mataró, levantándose muy temprano, hasta La Masia, la famosa academia juvenil blaugrana. A pesar de la fama y la presión de ser una estrella tan joven, Lamine asegura que todavía disfruta del fútbol como cuando jugaba en Rocafonda: “Si alguien está triste, puede venir a un partido, verme y marcharse más feliz. Esta sensación es la mejor del mundo”, explicaba.

Lamine Yamal, con la bandera de Mataró después de ganar la Eurocopa
El jugador, que hizo su debut profesional con el Barça a los 15 años convirtiéndose en el más joven de la historia del club, sigue manteniendo su humildad y los vínculos con Mataró. En la entrevista, reconoció que su vida como futbolista profesional es muy diferente a la de un adolescente habitual: paparazzi en la puerta de casa, apariciones en televisión y niños con su camiseta en la calle. Aun así, Lamine asegura que sabe disfrutar de pequeños momentos de normalidad con la familia y su hermano.

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