Baños Virgen de Carme: la autenticidad del 'merendero' en Montgat

Una joya viva de la tradición litoral catalana. Así se podría definir Banys Verge del Carme, en la playa de Montgat. Un chiringuito o, dicho con propiedad, ‘merendero’ fundado en el año 1928 y todavía en manos de la misma familia. Se encuentra, por méritos propios, entre los mejores chiringuitos del Maresme, una selección que se puede encontrar en el Capgròs de julio: edición especial de la mano de La Gourmeteria dedicada a la gastronomía de la comarca.
 
“Somos los únicos que conservamos la esencia de aquella Barceloneta ya perdida”, explica Sílvia Capo, tercera generación familiar ahora al frente del establecimiento, que defiende la intacta autenticidad del local: “Evitamos tocar nada que no sea absolutamente necesario. Se cae un palo, arreglamos ese palo, y así vamos haciendo”, destaca. Algo que salta a la vista de cualquier cliente que se adentra en los Banys, donde el ambiente es totalmente genuino. Paredes encaladas, techo de paja, manteles de cuadros, mesas de piedra… Nada que ver con el resto de chiringuitos “prefabricados” que ocupan la mayoría de playas del Maresme y de otras zonas. 

Esta autenticidad también se traslada a la oferta gastronómica, sencilla y accesible. En los Banys Verge del Carme no hacen arroces, pero sí tapas generosas y platos fuera de carta sugeridos a diario en base al producto fresco disponible, como la dorada o el calamar a la plancha, el bacalao gratinado con alioli… Propuestas simples pero que son pura satisfacción para devorar con los pies en la arena protegidos del sol veraniego. Algo que se agradece especialmente son los precios contenidos. Por unos 20 euros puedes darte un buen festín. “Tenemos una política de precios que queremos que sea coherente y justa, si conseguimos producto asequible no queremos sacarle un beneficio del 300%”, dice Capo. 

La propuesta de Banys Verge del Carme hace que la clientela no sea la habitual de los chiringuitos más turísticos. Al ‘merendero’ acude sobre todo el público local, tanto del bajo Maresme como de Barcelona. “No trabajamos pensando en los turistas, sino en los locales, pero evidentemente todo el que entre es bienvenido.” Esta apuesta por la autenticidad y la proximidad les ha ayudado a mantenerse a pesar de la pandemia y las dificultades económicas.

La existencia de un establecimiento como este es un rara avis en toda la costa catalana, y parece que, por desgracia, no durará para siempre. Una de las principales amenazas es la erosión de la costa, un fenómeno muy habitual en el Maresme y que Montgat sufre especialmente. “La arena de la playa nos ha ido desapareciendo, el año pasado ya tuvimos que hacer un muro de contención”, explican desde el local. La continuidad también dependerá del relevo generacional en la familia, en un sector que, como dice Capo, “es muy duro y muy esclavo”. Un sacrificio que es muy agradecido y apreciado por una clientela fiel a uno de los lugares más especiales del Maresme. Banys Verge del Carme es más que un chiringuito: es un viaje al pasado sin renunciar al sabor del mar y a la calidez de la proximidad.

Qué lo hace especial

• Autenticidad preservada. Mantiene intacta la estética de los chiringuitos originales de 1928, con un espíritu genuino y sin artificios.
• Gastronomía de proximidad y asequible. Ofrece tapas y fritos marineros hechos con productos locales, con una relación calidad-precio excelente (menos de 20 €).
• Ubicación privilegiada y ambiente local. Situado a pie de playa, destaca por un ambiente tranquilo, frecuentado por clientes habituales y familias de la zona.
• Arraigo histórico. Es uno de los últimos baños o restaurantes del litoral catalán que conserva vivo el espíritu tradicional de la costa.

LA FICHA

1. Nombre: Banys Verge del Carme
2. Dirección: Carrer del Mar, 4B, 08390 Montgat, Barcelona
3. Teléfono: 667 29 86 87
4. web: banysvergedelcarme.com