Dormir mal se ha convertido en una de las preocupaciones de salud más extendidas de la sociedad actual. Según datos de la Sociedad Española del Sueño, solo la mitad de la población española duerme las horas recomendadas por los expertos. Se calcula que cerca de cuatro millones de personas sufren algún trastorno relacionado con el sueño, como insomnio, descanso de mala calidad o sueño fragmentado.
Ante esta realidad silenciosa pero alarmante, los especialistas insisten en que es necesario acudir al médico de cabecera en caso de sufrir problemas para dormir. El descanso deficiente no es solo una molestia: también es un factor de riesgo para enfermedades graves, especialmente cardiovasculares.
En este contexto, el cardiólogo murciano José Abellán ha publicado recientemente un artículo divulgativo en el que comparte consejos prácticos para mejorar el descanso. Abellán, con una trayectoria profesional extensa y reconocida —doctor en Medicina, especialista en cardiología y autor de varios estudios científicos—, advierte que la sociedad actual ha normalizado el hecho de dormir poco o mal, viendo el descanso como una pérdida de tiempo. “Descansar no es un lujo, es una necesidad biológica”, afirma.
Dormir bien, clave para la salud del corazón
Según Abellán, un buen descanso contribuye a regular la presión arterial, el ritmo cardíaco y las hormonas, elementos fundamentales para mantener una buena salud cardiovascular. Por ello, las personas que duermen poco o con dificultades tienen un riesgo más elevado de sufrir problemas cardíacos.
Su 'truco' para dormir mejor
Entre los diversos consejos que ofrece, uno de los más sorprendentes es este: “No te tumbes durante el día si no es para dormir”. Esta postura aparentemente inofensiva puede alterar los ciclos naturales de sueño del cuerpo y dificultar el descanso nocturno. Según Abellán, mantenerse activo y erguido durante el día ayuda al cerebro a identificar con claridad cuándo es hora de dormir.
Otras recomendaciones que comparte incluyen:
- Exponerse a la luz solar por la mañana para sincronizar el reloj biológico.
- Evitar ejercicio intenso a última hora del día.
- Cenar temprano y de forma ligera para facilitar la digestión.
- Dormir en una habitación fresca (entre 20 y 21 grados).
- Reducir la luz azul de pantallas antes de ir a dormir.
- Crear un ritual relajante, como por ejemplo tomar una infusión por la noche.
Abellán concluye que “el gran error es intentar arreglar el sueño solo por la noche”. Para él, la clave para descansar mejor puede estar más en lo que hacemos durante el día que en la hora de ir a dormir.
Con estos hábitos sencillos pero efectivos, el cardiólogo anima a la población a recuperar el valor del descanso como una herramienta imprescindible para la salud integral.
Fuente: www.diariodemallorca.es/salud
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