Capgròs
El estreñimiento es un problema digestivo muy común que puede afectar la calidad de vida de muchas personas. Según IFEMA Madrid, esta condición puede tener diversas causas, pero uno de los factores clave es la falta de fibra en la dieta. La fibra es esencial porque ayuda a suavizar las heces y aumentar su volumen, facilitando así su eliminación. Cuando la dieta es pobre en fibra, el tránsito intestinal se vuelve más lento y es más fácil que aparezca el estreñimiento.
Además, el sedentarismo juega un papel importante. La falta de ejercicio reduce la actividad del colon y dificulta la eliminación de los residuos del organismo. Por este motivo, los expertos recomiendan seguir hábitos saludables que combinen una alimentación rica en fibra, una correcta hidratación, actividad física regular y evitar alimentos procesados o muy grasos que pueden entorpecer la digestión.
Fruta y fibra: una combinación esencial
Para prevenir y aliviar el estreñimiento, una de las mejores opciones es incorporar más fruta a la dieta. Algunas de las más conocidas por favorecer el tránsito intestinal son las peras, la papaya, el kiwi y, sobre todo, las ciruelas. Es importante recordar que, siempre que sea posible, se debe consumir la fruta con piel, ya que es precisamente en esta parte donde se concentra la mayor cantidad de fibra.
Aunque popularmente se piensa que el kiwi es la fruta estrella para solucionar este problema, la realidad es que la ciruela es aún más efectiva y deliciosa.
La ciruela: la reina contra el estreñimiento
Las ciruelas son uno de los laxantes naturales más potentes. Su secreto reside en la combinación de fibra, sorbitol y azúcares naturales. El sorbitol es un tipo de azúcar alcohol que ayuda a suavizar las heces, haciendo que sea mucho más fácil expulsarlas. Además, las ciruelas aportan fibra soluble e insoluble, una combinación que mejora notablemente la regularidad intestinal.
Consumir ciruelas de forma habitual puede aumentar el número de deposiciones semanales y ayudar a mantener el colon sano y activo. Además, las ciruelas contienen inulina, un tipo de fibra con efecto prebiótico que favorece las bacterias beneficiosas del intestino, mejorando así la salud digestiva de forma global.
Diferentes formas de disfrutarlas
Hay varias maneras de incorporar esta fruta a la dieta. Las ciruelas frescas son ideales para comer solas o añadir a ensaladas y postres. Las ciruelas pasas son las más recomendadas, ya que concentran aún más fibra y sorbitol. También se puede preparar agua de ciruelas, dejándolas en remojo toda la noche para beber el agua por la mañana. Finalmente, la compota de ciruelas es una opción deliciosa para incluir esta fruta en el desayuno o como merienda.
Un hábito sencillo con grandes beneficios
En definitiva, la ciruela es una aliada excelente para combatir el estreñimiento de forma natural, sencilla y sabrosa. Acompañada de una dieta equilibrada, abundante agua y ejercicio físico, puede ayudar a mantener una buena salud intestinal y evitar molestias digestivas innecesarias.
Fuente: www.eleconomista.es/salud-bienestar
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