Autobús interurbano en la capital del Maresme
Autobús interurbano en la capital del Maresme

Solo 15 viajes en transporte público por cada 100 en vehículo privado en el Maresme

A pesar del aumento de usuarios en la comarca y en la demarcación de Barcelona, Cercanías continúa siendo poco fiable y los buses interurbanos no cubren todas las necesidades

AMARGANT PATROCINI CABRERA
 

El vehículo privado siguió imponiéndose como la opción principal para viajar en la demarcación de Barcelona y también en el Maresme, según la Encuesta de Movilidad en Día Laborable (EMEF) 2024, promovida por la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) y realizada por el Institut Metròpoli. El estudio, presentado este martes, revela que a pesar del crecimiento del uso del metro, bus o tren, la dependencia del coche y la moto sigue siendo muy elevada en la comarca. En el Maresme, por cada 100 desplazamientos en vehículo privado solo se realizan 15 en transporte público, una cifra lejana a comarcas como el Barcelonès, donde la ratio es inversa.

Los responsables de la EMEF atribuyen parte del crecimiento del transporte público a la bonificación de los títulos multiviaje, como la T-usual. Esto ha permitido alcanzar una media diaria de 3,6 millones de desplazamientos en la región, un 8,6% más que en 2023 y un 9,1% más que en 2019.

A pesar de este récord, la opción del coche o la moto también ha crecido ligeramente (+0,9%), con una media de 6,6 millones de movimientos al día y una cuota del 33,5%. Esta cuota es la segunda más baja de la década, pero sigue siendo predominante fuera del Barcelonès.

Atasco en la Avenida del Maresme

Atasco en la Avenida del Maresme de Mataró

Problemas en el Maresme: la línea R1 y la falta de conexiones

El Maresme es una de las comarcas donde la dependencia del vehículo privado es más marcada. Los problemas de fiabilidad de Rodalies, especialmente en la línea R1, son uno de los factores que explican la desconfianza de muchos usuarios hacia el tren. Para compensarlo, la línea de autobuses interurbanos entre Mataró y Barcelona ofrece una alta frecuencia, pero muchos residentes consideran que sigue siendo insuficiente para competir con la flexibilidad del coche.

Además, la falta de frecuencias y la mala coordinación horaria entre autobuses y trenes hacen que los desplazamientos entre municipios del Maresme sean especialmente complicados sin vehículo privado. Esta situación contribuye a que, como muestra la EMEF, en el Maresme solo se realicen 15 trayectos en transporte público por cada 100 en coche o moto, mientras que en el Vallès Occidental la ratio es de 23/100 y en el Baix Llobregat de 20/100.

La estación de Rodalies de Mataró. Foto: R. Gallofré

La estación de Rodalies de Mataró, vacía al día siguiente del gran apagón. Foto: R. Gallofré

Cuatro puntos clave

  1. Dependencia del vehículo privado. En el Maresme, por cada 100 desplazamientos en coche o moto solo se realizan 15 en transporte público, una ratio muy inferior a comarcas como el Barcelonès, donde la situación es inversa.
  2. Problemas con Rodalies y la red de buses. La baja fiabilidad de la línea R1 de Rodalies y la falta de coordinación entre buses y trenes dificultan el uso del transporte público, especialmente para moverse entre municipios de la comarca.
  3. Incremento moderado del transporte público. Las bonificaciones de los títulos multiviaje han aumentado los usuarios del transporte público, pero no han conseguido revertir la supremacía del coche en el Maresme.
  4. Movilidad activa y retos pendientes. Caminar, ir en bici o patinete desciende en la comarca respecto a Barcelona ciudad, y casi 7 de cada 10 encuestados denuncian incidencias en el servicio ferroviario, un reto clave para reducir el uso del vehículo privado.

La movilidad en la demarcación de Barcelona

En la Región Metropolitana de Barcelona (RMB), que incluye capitales como Mataró, Terrassa y Sabadell, la cuota del vehículo privado fue del 31,5% en 2024, con 5,6 millones de desplazamientos diarios. En la capital catalana, en cambio, solo el 16,7% de los viajes fueron en coche o moto.

La movilidad activa (ir a pie, en bicicleta o con patinete eléctrico) cayó un 7,6% en toda la región y se situó en una cuota del 48,3%. Aun así, sigue siendo la primera opción en Barcelona ciudad (54,5%) y en el Área Metropolitana (51,5%), mientras que en la RMB, con municipios como Mataró, baja hasta el 49%. En cuanto al transporte público, en la RMB la cuota es del 19,6%, claramente inferior al 30% de Barcelona ciudad.

Incidencias y retos

Otro elemento destacado de la EMEF son las incidencias. Un 68,3% de los encuestados admitieron haberse encontrado problemas en la red ferroviaria en algún momento. Este porcentaje pone de manifiesto las dificultades para ofrecer un servicio fiable fuera del núcleo urbano.

El director general de la ATM, Manuel Valdés, ha defendido las mejoras introducidas con la T-mobilitat y espera que la migración hacia abonos fomente un uso aún más generalizado del transporte público.

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