Capgròs
El alcalde de Mataró y presidente de la Federación de Municipios de Cataluña (FMC), el socialista David Bote, discrepó ayer miércoles de las tesis de algunas voces municipalistas de JxCat que reclamaban más autonomía para decidir a quién empadronar con el objetivo de preservar los servicios públicos.
En un desayuno informativo del New Economy Forum celebrado en Barcelona, Bote remarcó que “con cambios en el padrón no se resolverán otras problemáticas”, entre las cuales situó las vinculadas con la seguridad o la calidad de los servicios municipales, según declaraciones recogidas por EFE.
El presidente de la FMC, que durante el acto centró su discurso en ámbitos como las infraestructuras y la movilidad, reaccionó así a las manifestaciones que la semana pasada había hecho el alcalde de Vic, Albert Castells (JxCat), que reclamaba que los ayuntamientos pudieran decidir a quién empadronan ante la llegada de personas sin permiso de trabajo que, según él, habrían “colapsado” los servicios municipales. Sobre esta propuesta, Bote dejó claro que “a priori no estoy de acuerdo” y subrayó que “el padrón es una herramienta de control” imprescindible para el funcionamiento de los ayuntamientos. En cambio, Bote cree que hay que apostar por “reforzar los servicios públicos”.
Municipalismo para frenar a la extrema derecha
El acto —que contó con la presencia del presidente José Montilla, el conseller Ramon Espadaler, el alcalde de Cornellà, Antoni Balmón, y el presidente del grupo parlamentario socialista, Ferran Pedret— sirvió también para que Bote expusiera una defensa del municipalismo tanto en la “transformación y dignificación del espacio público” como en la necesidad de “preservar el mundo local de las olas de polarización”. En este punto, advirtió del auge de la extrema derecha y del riesgo de que, en las elecciones municipales de 2027, ésta incrementara su presencia en los ayuntamientos catalanes.
Según Bote, el antídoto pasaba por afrontar los retos estructurales del territorio, especialmente los “desequilibrios territoriales y la despoblación”. Lamentó que las desigualdades sociales estuvieran generando “una segregación en base a la renta con salto de municipio”, con localidades que concentraban las rentas más altas y otras que acumulaban la población con menos recursos y presupuestos muy tensionados por el gasto social. “Esto pone en peligro el esqueleto de la red de ciudades que sostiene el país”, afirmó.
Por todo ello, el presidente de la FMC reclamó la necesidad de revisar el actual sistema de financiación local y avanzar hacia “una mejor distribución” que permitiera a los municipios afrontar con garantías los retos demográficos y sociales actuales.
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